El origen de la tan usada palabra brand (marca) viene del antiguo término nórdico brandr, que significa “quemar“, era la marca que se hacía al ganado con hierros incandescentes, que llegó a Inglaterra con las incursiones de vikingos por el año 793. En este momento empieza el uso del branding tan necesario en nuestra era de la comunicación.
¿Qué pretendemos con una marca? ¿Con el proceso de branding? Pues es muy simple: grabar, hacer MEMORABLE la marca en el consumidor, posicionarla en la MENTE para cuando necesite algún producto o servicio en esa categoría de compra seamos los primeros. Una marca de ciudad (city branding) debe dejar huella para que cuando se piense en viajar, la marca sea la primera en aparecer.
¿Tiene Sevilla una marca? En realidad no la tiene. La tuvo pero no la mantuvo. Aquel maravilloso 1992, la Exposición Universal donde la grandiosa inversión de todo un país en Sevilla no tuvo continuidad en la construcción y comunicación de su marca mundial. Barcelona92, la sede olímpica, le dio continuidad y coherencia a la inversión de España en los Juegos, y a día de hoy tiene unos resultados claros.
NODO no es una marca. Es el emblema institucional que nos une a la tradición. No representa un reto colectivo, un mundo de sensaciones, un universo de atracción.
¿Por qué necesita Sevilla un buen ejercicio de branding?
- Porque reporta personalidad e influye en las preferencias de los visitantes al desarrollar lazos emocionales y de confianza más fuertes.
- Porque muestra tangibles e intangibles.
- Ofrece más relevancia, mayor presencia y mejor visibilidad.
- Porque comunica mejor.
- Conecta globalmente.
- Comunica los valores cívicos que definen la ciudad y su idiosincrasia.
Las marcas posicionan y se ubican mejor en la mente del viajero, del residente y del inversor. El branding de ciudad debe estar presente en el imaginario colectivo por ventajas reales y diferencias favorables. La marca renueva la autoestima porque permanentemente reenamora al recordar los atributos, valores y atractivos.
¿Qué supone una marca más fuerte?
- Incremento de la visibilidad.
- Captación del interés general, de nuevos visitantes.
- Atracción
- Fidelización
Sevilla tiene REPUTACIÓN (porque fue capital del mundo, por su patrimonio, por su alegría, luz, artes,…) pero no tiene marca. Hay que crearla entre todos. Una buena marca repercute en todo. La ciudad en su conjunto se revaloriza. Todos ganamos. Y las decisiones compartidas significan CONSENSO y un gran respaldo social porque una buena marca es para siempre.
Los 700.000 sevillanos residentes son los mejores 700.000 embajadores/portavoces de Sevilla. Los actores de la ciudad son claves en un proceso de branding compartido y dialogado. La aportación generosa de todos consigue unos resultados óptimos.
Desde 1929 que se produjo la primera Exposición Universal hasta hoy ¿cuánto han invertido los sucesivos gobiernos en la MARCA SEVILLA? Hubo dos hitos: la Expo de 1992 y el Campeonato del Mundo de Atletismo en 1999 que no se aprovecharon.
Es el momento de hacerla porque la marca es proactiva y :
- activa a la sociedad participativa
- ordena retos comunes
- aglutina esfuerzos
- genera autoestima
- refuerza vínculos
Una marca de ciudad es una decisión estratégica para el medio y largo plazo. No es un logo ni una campaña temporal.
Hay muchas herramientas y métodos para desarrollar un buen city branding, aquí sintetizamos uno:
- Conocer los retos de la ciudad
- Acompañar al plan estratégico
- Diálogo y participación para el consenso
- Destacar la identidad y singularidad
Es el momento de iniciar un proyecto de city branding que aporte mayor visibilidad a la gran reputación que tiene Sevilla en la historia de la humanidad.