Crear una marca/brand de ciudad es una labor de diálogo compartido y de esfuerzo continuado en el que toda la sociedad aporta su parecer, su grano de arena a la nueva imagen que se proyectará de la comunidad/localidad/municipio/ciudad/metropoli al mundo.
La marca de ciudad aporta autoestima y une esfuerzos comunes de toda la sociedad para promover la nueva imagen de la ciudad, pero no debe realizarse sin contar con los ciudadanos, porque las oportunidades de negocios de la marca de ciudad se diluyen sin el respaldo de los residentes que son los que realmente impulsan la nueva marca que harán suya, activarán y moverán por el mundo.
Dos son los pasos claves en este delicado proceso:
articular la identidad urbana (aspectos estructurales y valores socioculturales de la ciudad); pasar esta identidad a imagen (mediante símbolo, logotipo, lema, icono).
No olvidemos que esta creación deber ser aceptada por la ciudadanía ya que si es impuesta y los habitantes no se sienten representados e identificados, la MARCA no funcionará.
El desarrollo de la nueva imagen que sintetiza la ciudad se basa en las experiencias asociadas a la marca por lo que requiere la implicación y el apoyo activo de todos los sectores de la sociedad. La mejor conclusión es que crear City Branding no es simplemente elegir un logotipo y realizar una campaña de comunicación.