Olvera, uno de los pueblos blancos de la sierra de Cádiz.
El caso de Bilbao que ha conseguido hacerse un hueco en el mundo gracias a la construcción del Museo Guggenheim, convirtiendo una zona industrializada de la ciudad en un lugar bello y que cualquier turista que elige España como destino no puede dejar de visitar.
Según Bassat “no es necesario levantar grandes construcciones sino ser valiente para emprender pequeñas acciones con las que se puede conseguir mucho”. Y sobre todo sacarle mucho más partido a lo que cada ciudad tiene de reseñable y darlo a conocer al mundo con una buena estrategia de city marketing”.